Buenos consejos, hoy los llevaré a la práctica ya que me siento muy triste. A veces, por la intolerancia, es deprimente ser budista y vegetariana en mi país =(

Espero ya apareciera la gatita.

Nunca he tenido gato o gata, hasta ahora. Resulta que entró una gata de un año aproximadamente, por la puerta de mi trabajo, venia maullando, haciendome «alegrias», girando sumisamente su cuerpo para que la acariciara. La alimenté y decidi que estuviera hasta que quisiera. Dejé siempre la puerta abierta habitualmente y ella salía y volvia al ratito y ya no salía. Decidió vivir alli. Pero en menos de una semana que llevaba allí, mi mujer e hija me pedían llevarmela a casa, y así lo hice. Hoy es la alegria de nuestro hogar, nos provoca para jugar, se come algunas plantas (sabiendo que nuestras regañinas son casi de broma), la queremos como un miembro mas de nuestra familia, y si se perdiera o le pasara algo, sé lo que sentiríamos. Ojalá este camino que emprendo ahora, me ayude a entender y poner en práctica lo que arriba comentas. El desapego, no es solo ante lo material, sino también en otros ámbitos como el emocional. Para mi, una persona que desde pequeño he bloqueado muy bien mis emociones, reconocer que las tengo, ya es un arduo trabajo.
Un abrazo.

Kid, ya aparecio?

ojala encuentres pronto la paz de perder a tu gatita…

:s como no estar triste?? ojala que aparezca tu gatita! O minimo que este en manos de alguien que la quiera y cuide tanto como tu 🙂
A mi me gusta pensar asi… aunque lo seria que encuentre su camino de regreso

Xoxo