El Tao de cocinar
Cualquier actividad de nuestra vida diaria puede convertirse en un momento de meditación y en un momento de maravillosa atención consciente.
En las últimas semanas me he dado a la tarea de cocinar para mí una vez al día, con toda calma, inmerso en la actividad que estoy haciendo, consciente de cada trozo de cebolla que corto, del fuego del sartén, cosciente del movimiento para batir algo, 100% presente en el momento de cocinar, fluyendo y creándolo.
Esta actividad se ha convertido en un momento de calma y paz, lleno de mucha felicidad (por que me gusta cocinar) y amor hacia mi. Ya no es una interrupción para mi trabajo ni es algo que me quita el tiempo, como tantas veces lo vi en mis días de oficina, ahora es algo que llena de gusto y disfruto mucho.
Cocinar se ha convertido en otro momento de meditación y me encanta, claro que no sustituye mi Zazen mañanero, pero sí me llena de paz y me mantiene en el aquí y el ahora.
¿Se puede hacer esto con otras actividades?
Yo opino que sí.
¿Cual es el truco? estar presente 100% en la actividad a realizar y disfrutarla de manera consciente, concentrándome plenamente en esa sola tarea.
Mi propuesta para esta semana es ser más cosciente de otra actividad de mi vida, tal vez lavar mi ropa y lograr ese mismo estado que con cocinar.
Inténtelo, puede resultar divertido por decir lo menos.
Amitabha!
KidBuda