Breve Introducción al Dharma
No todas las religiones son iguales, pero en mi cabeza, la mayoría estaban llenas de ritos, dogmas, seres imaginarios. Cuando me acerqué al budismo, pensé que era igual de “diferente” a las demás.
Afortunadamente no me acerqué buscando una religión porque me hubiera decepcionado mucho. El budismo tiene sus ritos, y sus palabras especiales. Tiene su ética y su propósito pero nada más lejos de ser una religión en el sentido del creer, del dogma, del miedo al castigo o de la adoración.
Si el budismo no es religión ¿entonces qué es?
Bueno, es considerada universalmente religión pero en realidad es… ¡una fabulosa caja de herramientas!
Las enseñanzas de Buda, el Dharma, son estas herramientas verdaderamente útiles para vivir mejor.
Aquí algunos ejemplos:
- Piensa no creas. Buda decía con frecuencia que los que estudiaran sus enseñanzas no debían creer en lo que decía solo porque lo decía. Había que RAZONAR y además poner en práctica las “clases”. De otra forma, las enseñanzas no tendrían sentido. El budismo nos enseña a pensar.
- La meditación: es un instrumento para afinar (como se afina un instrumento) la mente. La cual suele estar fuera de forma, dispersa, fácil de distraer y, bueno, desafinada. Tener un método efectivo (aunque largo) para regresarle a la mente todo su maravilloso poder de concentración y de análisis para resolver problemas es más que afortunado. Una herramienta invaluable.
- La paciencia. Indispensable en cualquier kit de supervivencia, la paciencia es una cualidad que se cultiva en el budismo con especial ahínco. Es a través de ella que podemos pasar a través de miles de situaciones en la vida.
- Conocimiento. Buda descubrió que el sufrimiento es parte de la vida y en el camino, afortunadamente, también descubrió como hacer cesar ese sufrimiento. Imaginen por un momento que pueden ver con la claridad con la que ven una película HD, las causas de insatisfacción en su vida: De pareja, de trabajo, con su cuerpo, todas las causas de todas las insatisfacciones, frustraciones, y claro, fuentes de sufrimiento. Dicen que la mitad del camino es ver cual es el problema ¿cierto? ahora, imaginen que poco a poco y con disciplina, al ir adquiriendo conocimiento sobre la verdadera naturaleza de las cosas (y las personas!) van disolviendo cada insatisfacción…
Bien, ese es el propósito del budismo. Iluminación es simplemente un estado de conciencia a través del cual se erradican las limitaciones de la persona y se alcanza la genuina felicidad.
Lo interesante de esta caja de herramientas es que no promete nada de esto con base en creencias. El uso de estos instrumentos es lo que te llevará a completar el propósito. Tal como las herramientas del carpintero nos servirían para construir un librero.
Lo mejor es que nuestra caja trae los manuales e instructivos para levantar el librero sin que tengamos que andar averigüando. Eso ya lo hizo Siddharta Gautama (Buda) hace más de 2,000 años y no es por nada pero el modelo de librero que inventó bien vale la pena el trabajo para tratar de replicarlo (: